"Si yo no elijo café de Comercio Justo o un queso producido en
mi comarca porque me sale más caro o porque tengo que caminar
10 minutos hasta la tienda donde lo venden, ¿por qué pongo
a caldo a las grandes empresas y a los gobernantes cuando se
fijan más que nada en los beneficios económicos y electorales?
mi comarca porque me sale más caro o porque tengo que caminar
10 minutos hasta la tienda donde lo venden, ¿por qué pongo
a caldo a las grandes empresas y a los gobernantes cuando se
fijan más que nada en los beneficios económicos y electorales?
Se trata de no reproducir a nuestra escala lógicas
que no nos gustan...
que no nos gustan...
Pero si lo que no sirve para otras sirve para mí entonces es un claro
caso de “ley del embudo”: para mí lo ancho –ya que soy un pobre
ciudadano que lucha por sobrevivir– y para ti lo estrecho –ya que eres
un poderoso político o empresario sediento de poder".
caso de “ley del embudo”: para mí lo ancho –ya que soy un pobre
ciudadano que lucha por sobrevivir– y para ti lo estrecho –ya que eres
un poderoso político o empresario sediento de poder".
Seamos consecuentes. Eso no quiere decir cesar en la crítica,
sino pasar a la acción.
Texto en cursiva leído en el libro Consumir
Menos Vivir Mejor, Ideas prácticas
para un consumo más consciente, de Toni Lodeiro. La negrita es mía.
para un consumo más consciente, de Toni Lodeiro. La negrita es mía.
Imagen de Wikimedia Commons
Parece razonable y coherente.
ResponderEliminarO no?
Pues sí.
ResponderEliminar